Parece ser que ETA ha mandado una nueva remesa de cartas de extorsión a empresarios navarros. Personalmente, y aunque Arzallus diga que han cambiado el tono de las amenazas, si a mi me llegara una de esas cartas hoy me sentiría amenazado. Muy amenazado. Eso implica que mi vida corre peligro si no acepto el chantaje de "pagar".

Pague o no pague mi libertad se ve menguada. Y para mi el sistema democrático ha sucumbido. No tengo garantías. Estoy solo.

Supongo que en esa tesitura observar que mi Gobierno niega que a mi me estén amenazando me puede parecer una aberración. Escuchar que miento porque quiero cargarme "la paz" sería para mi una pesadilla, el mundo al revés.

¡Pero si me están amenazando a mi!

¿El Gobierno a quien cree, a ETA (que dice que o ha dejado temporalmente) o a mi (que tendría la carta de extorsión entre mis manos?

¿Qué "paz" ofrece ETA?

Y lo más terrible ¿Qué "paz" está buscando mi Gobierno?

Negarlo es apartarse de la realidad. Y por mucho que se niege, la realidad es tozuda y persiste. ETA sigue extorsionando. ETA sigue amenazando. ETA sigue con la violencia en la calle. ETA sigue armándose.

¿Por qué el Gobierno se empeña en negar lo evidente?¿Por qué mi Gobierno quiere que no vea la realidad?

Algún día espero que alguien del Gobierno se digne a contestar a la ciudadanía. Porque MERECEMOS UN GOBIERNO QUE NO NOS MIENTA

¿O ya no?

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